Despeja tus dudas
El proyecto eólico de Statkraft contempla la construcción de tres parques eólicos emplazados próximos a la localidad de Villa Mantaliales, en la comunidad de Litueche, región del Libertador Bernardo O’Higgins. Con el fin de entregar información certera y aclarar dudas sobre los efectos que el proyecto podría causar, compartimos las respuestas a una serie de preguntas frecuentes.
Esta zona cuenta con condiciones geográficas y climáticas ideales para el desarrollo de este tipo de proyectos.
Como puede verificarse en la imagen del explorador eólico de la Universidad de Chile, la zona posee un buen recurso eólico, con vientos estables a lo largo del año, pero con variaciones diarias:
Los tres parques estarán conectados de forma subterránea e independiente entre sí a la nueva subestación Cardonal, lo que permitirá minimizar el impacto visual de las líneas de alta tensión en la zona.
Adicionalmente, se contempla el desarrollo y construcción de una línea de transmisión que permitirá inyectar la energía al Sistema Eléctrico Nacional (SEN). Esta línea, que tendrá aproximadamente 12 km longitud, requerirá de la construcción de 67 estructuras o torres de diversos tipos. En su trazado no existen construcciones, viviendas o edificaciones afectadas, y se definió una ruta de manera de minimizar los impactos ambientales y de cumplir la normativa respectiva.
Si, los tres parques eólicos y la línea de transmisión fueron ingresados a evaluación ambiental de manera independiente, ya que los cuatro son proyectos independientes uno del otro. Es decir, pueden ser construidos y operar por sí solos, sin estar condicionados a la operación de los otros parques.
En 2015, antes de la adquisición de Torsa Chile y sus activos por Statkraft Chile, fue aprobado el parque eólico Cardonal. Luego en 2015 y 2016 fueron ingresados a evaluación ambiental los parques Manantiales y Los Cerrillos, respectivamente, y aprobados ambos en 2017. Por consiguiente, los tres parques eólicos cuentan con su licencia ambiental aprobada, a través de sus correspondientes Resoluciones de Calificación Ambiental (RCA). Además, en mayo pasado, fue aprobado ambientalmente el proyecto de transmisión eléctrica que permitirá la conexión de los parques con el Sistema Eléctrico Nacional (SEN).
Los aerogeneradores no son ruidosos. La evolución de la tecnología eólica ha hecho casi imperceptible su ruido mecánico. El zumbido aerodinámico de las palas cuando pasan por delante de la torre es el principal sonido que producen. Nuestra legislación vigente (D.S. N°38/11) determina el nivel máximo permitido de ruido, la cual es cumplida en todo momento por nuestros parques eólicos.
De acuerdo con los resultados obtenidos de la evaluación ambiental de los parques eólicos en cuanto a la fauna asociada a los hábitats de relevancia para su nidificación, reproducción o alimentación, los valores obtenidos en la modelación proyectada NO superan los máximos permitidos por la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (Effects of Noise on Wildlife and Other Animals, 1971, United States Environmental Protection Agency). Además, de acuerdo con la Guía de Evaluación Ambiental de Fauna Silvestre del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), las modelaciones acústicas efectuadas determinan que no se sobrepasan los niveles de ruido máximos permisibles para la fauna silvestre.
No, de acuerdo con los estudios de línea de base efectuados en el área de influencia de los proyectos no se evidenciaron especies en categoría de conservación “en peligro” o “en extinción”.
En el lugar existen especies como la Lagartija esbelta, Lagartija lemniscata y Cururo. Respecto de la flora y vegetación, existen especies como el palito negro, quisco y quillay. Con el objetivo de conservar a la vida de los individuos de especies de flora y vegetación y fauna, localizadas en el área de influencia del proyecto se considera la implementación de planes de manejo ambiental.
Ese impacto, así como otros de tipo ambiental, están estudiados en las Declaraciones de Impacto Ambiental (DIA) de cada iniciativa. De acuerdo con el análisis realizado no existe un impacto visual de los aerogeneradores significativo.
En línea con el compromiso de Statkraft por contribuir a generar un ecosistema sostenible hemos optimizamos cada proyecto, lo que trae como resultado una disminución importante de equipos en terreno, acotando el impacto sobre el paisaje. Los tres parques en conjunto operarán 19 de estos equipos, lo que implica una positiva optimización, reduciéndolos en 47% en relación con lo definido originalmente.
Efectivamente los parques consideran los efectos que puede tener la sombra en los receptores sensible. Por ello, el proyecto evaluó la configuración de los parques eólicos y las características de los aerogeneradores (altura y diámetro de rotor). Además, se consideró los efectos sinérgicos de los posibles efectos de otros parques eólicos del sector de interés, y se investigó el potencial de causar parpadeo de sombra sobre potenciales edificaciones dentro del área de estudio con una extensión de 2 kilómetros alrededores de los aerogeneradores de los parques eólicos.
Dado que actualmente no existe ningún marco normativo nacional que contemple el parpadeo de sombra, las modelaciones realizadas por el proyecto siguen el procedimiento descrito por las Guías Técnicas Alemanas, que cabe señalar es una de las más estrictas.
Cada Declaración de Impacto Ambiental (DIA) de los parques eólicos del proyecto Statkraft Eólico cuenta con un estudio de campos electromagnéticos (CEM) y su potencial interacción con la transmisión y recepción de diferentes señales. En Chile no existe normativa específica al respecto, por lo que se utiliza la normativa de otros países con la finalidad de contar con una referencia adecuada.
De los estudios previamente desarrollados, es posible observar que los tres parques no representan una alteración significativa para los servicios de telefonía móvil, señales de televisión o radio.
Cabe destacar, que antes de iniciar la construcción de los parques se realizará un diagnóstico específico para identificar las condiciones de los sistemas de comunicación (radio, televisión y telefonía) de las viviendas que se encuentren a una distancia de 1 kilómetro alrededor del área de cada parque, de modo de conocer la situación actual y determinar la instalación de equipos repetidores que sean necesarios para restablecer la condición previa al funcionamiento del Parque Eólico, a causa de la exclusiva responsabilidad de la implementación de las obras del proyecto que sean consideradas fuentes de campos electromagnéticos.
No existe evidencia científica que permita establecer algún tipo de relación entre los campos electromagnéticos (CEM) generados por las turbinas eólicas y afectaciones a la salud de las personas. De hecho, se ha detectado que los niveles de campo electromagnético en las proximidades de las turbinas eólicas son más bajos que los producidos por dispositivos electrodomésticos de uso común.
Agencias gubernamentales y médicas, incluidas la Organización Mundial de la Salud, la Comisión Internacional de Protección contra Radiación No Ionizante, la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer, el Instituto Nacional de Salud de EE. UU., el Instituto Nacional de Ciencias de la Salud Ambiental y Health Canada han revisado minuciosamente la información disponible y no han encontrado evidencia científica que respalde un vínculo causal entre los CEM y problemas de salud, en los niveles que normalmente encuentran las personas.